Este blog es un trabajo colaborativo de los alumnos del IES San Juan de Dios (Medina Sidonia), del IES Las Salinas (San Fernando) y del IES La Caleta (Cádiz).

Pretendemos fomentar el consumo de verduras por parte de nuestros jóvenes, aporte fundamental de vitaminas, minerales y fibra, lo que mejorará y preservará su salud presente y futura.

Igualmente queremos fomentar el consumo de verduras de temporada, mejor si son de cultivo cercano, con lo que se contribuye a reducir los costes de transporte y almacenamiento, lo que disminuye el gasto energético y ayuda a la protección del medio ambiente.

Para los padres/madres:
Para conseguir que nuestro jóvenes coman verduras de temporada es fundamental la colaboración de las familias: sus comentarios, aportaciones y, sobre todo, que preparéis en casa las recetas que en este blog se proponen.

Para el alumnado:
Criterios de calificación.

jueves, 14 de mayo de 2015

La cereza

Una fruta climatérica es aquella que puede madurar una vez arrancada de la planta. Las frutas no climatéricas, por lo tanto, no maduran una vez recolectadas, por lo que es especialmente importante comerlas dentro de su temporada y elegirlas en su estado óptimo de madurez para apreciar todo su sabor, olor y características nutricionales.

La cereza, una fruta no clilmatérica.


Cereza, también conocido como guinda, es el nombre del fruto de varios árboles
La temporada de cerezas comienza entre los meses de marzo y abril, aunque es cierto que durante estos meses, por mucho que estemos deseando disfrutar de su sabor, ni su calidad ni su precio nos lo permiten.

Hay que tener un poco más de paciencia y esperar a la llegada de los meses de mayo y junio para disfrutar de las mejores piezas y a un precio algo más coherente. Aunque como ya sabréis, las cerezas suelen tener siempre precios realmente disparatados en comparación con otras frutas.

1. Busca cerezas que tengan piel firme y brillante. No debe haber manchas en la fruta. Deben sentirse duras y tienen un tinte más oscuro (el tamaño dependerá de la variedad).

2. Busca tallos de color verde brillante. Ese es un buen indicador de la salud y frescura de la cereza.

3. Mantén las cerezas por un tiempo muy corto a temperatura ambiente, el resto debe ser en refrigeración o congeladas.

Guárdalas a temperatura ambiente. Esto sólo funcionará para un máximo de 2 días. Si las cerezas se van comer de un recipiente dejado a temperatura ambiente, asegúrate de lavar y secar todas las cerezas para que la gente pueda tomarlas sin preocuparse de si están o no ya lavados. Reemplázalas a diario.
Colócalas en el refrigerador. Mantén las cerezas en una bolsa de plástico. Se mantendrán frescas por 3-5 días, o incluso hasta dos semanas. Si tienes un montón de cerezas, divídelas entre bolsas más pequeñas para evitar que se malluguen. No las laves antes de colocarlas en el refrigerador (esto ayuda a su deterioro), en lugar de eso, lávalas justo antes de comerlas.

4. Congélalas si lo desea. Las cerezas se congelan bien:

Lavar las cerezas y elimina cualquier suciedad o residuos. Sácales las semillas si lo deseas.
Deja que se sequen completamente.
Cubre una bandeja de hornear con papel de hornear.
Coloca las cerezas en la bandeja de hornear y colócalas en el congelador.
Sácalas una vez que estén congeladas y mételas en bolsas para congelador. Saca la mayor cantidad de aire posible para evitar las quemaduras por congelación. Sella y ponles fecha a bolsas individuales. Vuélvelas a meter en el congelador. Las cerezas congeladas se pueden conservar hasta por un año.
del género Prunus, aunque comercialmente se aproveche un número limitado de especies. Al árbol se le conoce como cerezo o guindo. Si bien todos las cerezos son del género Prunus, a éste pertenecen especies que no lo son, como el ciruelo, el almendro, el albaricoquero o damasco y el melocotonero o duraznero.


Nutrientes.


La cereza es una fruta rica en vitaminas A, B, C, E, K y PP, en hierro, calcio, magnesio, potasio y azufre.

Diez Grandes Beneficios para la salud de comer cerezas.

1. Las cerezas, son conocidas como “súper fruta”, están llenas de antioxidantes llamados antocianinas que ayudan en la reducción de enfermedades cardíacas y cáncer.

2. Las cerezas son una de las pocas fuentes alimenticias que contienen melatonina, un antioxidante que ayuda a regular el ritmo cardíaco y los ciclos de sueño del cuerpo.

3. Las cerezas son una excelente fuente de beta-caroteno (vitamina A). De hecho, contienen 19 veces más beta-caroteno que los arándanos y las fresas.

4. Las cerezas son ricas en vitaminas C, E, potasio, magnesio, hierro, ácido fólico y fibra.

5. Las cerezas se conocen como “alimento del cerebro”, ayudando en la salud del cerebro y en la prevención de la pérdida de memoria.

6. Debido a que las cerezas contienen antocianinas, pueden reducir la inflamación y los síntomas de la artritis y la gota.

7. Comer cerezas reduce el riesgo de diabetes.

8. Las cerezas son una buena fuente de fibra que es importante para la salud digestiva.

9. Las cerezas son una buena merienda o el postre de elección importante para el mantenimiento de peso, debido al poco aporte de calorías.

10. Debido a sus poderosos beneficios anti-inflamatorios, las cerezas pueden actuar en reducir el dolor

Receta: soufflé de cerezas


Ingredientes de la receta de soufflé de cerezas:

70 g de cerezas
2 huevos
70 g de harina integral
70 g de mantequilla
2 hojas de menta para decorar
50 g de azúcar moreno

Elaboración de la receta de soufflé de cerezas:

Para hacer la masa del soufflé, casca los huevos en un bol. Monta los huevos con la batidora. Añade el azúcar moreno al bol y continúa batiendo. Introduce la harina ( reserva un par de cucharadas) y mezcla todo bien, sin llegar a batir, con una lengüeta hasta que esté toda la harina bien incorporada. Reserva.

Introduce la mantequilla en una sartén al fuego. Parte las cerezas (reserva cuatro para decorar) por la mitad para saltear en la sartén durante unos 4- 5 minutos hasta que estén blanditas. Escurre las cerezas con la ayuda de un colador para quitarles bien la grasa de la mantequilla. Reserva.

Para hacer el soufflé, unta dos moldes aptos para el horno con una pizca de mantequilla y espolvoréalos con la harina que has reservado. Reparte la masa en los moldes y distribuye las cerezas que habías guardado sobre la masa. Hornea el soufflé a 180ºC durante unos 20 minutos.

Para enplatar, coloca cada molde de soufflé sobre un plato y decora con hojas de menta y las cerezas que habías reservado. Sirve.


Receta obtenida de: http://www.hogarutil.com/cocina/recetas/postres/200910/souffle-cerezas-75.html


Por Andrés Alonso Blanco (IES Las Salinas)

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